Me da la impresión de que, según se acumulan años, se olvidan los deseos importantes.
¿Recuerdas lo que querías ser cuando eras pequeño? ¿era una idea tan descabellada? ¿te gusta tu vida?
Son preguntas básicas que a veces se amontonan debajo de otras mucho más estúpidas. En el archivo de “ah sí, esto me lo tengo que mirar” del cerebro. Y mientras tanto, ideamos una respuesta típica para cuando surja el tema de conversación. Se vuelve casi como hablar del tiempo, conversaciones repetidas con preguntas y respuestas aprendidas.
Seguro que no quisiste ser oficinista (con todos mis respetos a los que son oficinistas por vocación).
Sí, vas a venirme con lo del dinero para vivir y todos esos tópicos que nos ha enseñado el Gran Hermano (el de Orwell, no el de Tele5). Pero entonces prometo contraatacar con el manido proverbio chino sobre la felicidad y el que menos necesita…
Hace unos días hice introspección y me di cuenta de que lo que me llena en la vida es tocar la guitarra y cantar. Surgió de la típica conversación sobre qué haría si no necesitara trabajar para vivir. No lo dudé. Es importante saber lo que deseas.
No te engañes, no hablo de llenar estadios y hacerme de oro, hablo de lo que siempre hice, tocar en pequeños locales, charlar con la gente después, encontrar la paz y volver a lo básico, al placer tan insufrible y tan insustituible de hacer canciones por el hecho de hacerlas y luego, ruborizarme cuando las muestro en público.
Sólo puedo tocar a horas intempestivas (sí, por lo del dinero para comer) y donde vivo las paredes son de papel de fumar (guardaré lo que suelo oír al otro lado de las paredes para otra entrada).
Así que me he liado la manta a la cabeza, he roto el cerdito de las emergencias y con lo que ha salido he empezado a construir un búnker donde poder gritar y tocar a gusto a cualquier hora.
Para que suene mejor, lo he llamado estudio de grabación, pero yo lo veo como un búnker donde poder traer a todos mis compañeros de faenas gritones armados con baterías, guitarras, didgeridoos o lo que les apetezca.
Hoy lo ha visto Miguel, y creo que le ha parecido bien, no dijo mucho, pero sacó unas fotos; aunque eso no es indicativo de que le gustase, le he visto sacar fotos desde señales de tráfico hasta ceniceros, pasando por botellas de Mahou en la basura.
Ahí va una de las fotos que me ha pasado Miguel. Espero te guste mi pequeño refugio de ilusiones.
Por cierto, si estás leyendo esto, enhorabuena, este blog ha sido creado como un rinconcillo escondido tras un callejón de la red. Lejos de neones, casinos online, porno amateur y alardes tecnológicos. Si vienes con tu careta del día a día puesta, déjala a la entrada. Aquí sólo nos miraremos a los ojos.
Gracias,
Hare
Los sueños están hechos para ser perseguidos , anhelados, idealizados e incluso,en raras ocasiones , materializados…y no solo en cuanto el vil metal lo permite, sino cuando el momento espiritual y mental llega.
Creo que tu momento ha llegado, y si no…¿por qué esperar a que llegue oficialmente? La vida no se hace más fácil si hablamos de sueños y de ilusiones…Adelante con tu proyecto, que la vida es demasiado corta para perder el tiempo en cosas que no nos gustan. Enciérrate en ese estudio y da rienda suelta a todo eso que sabemos que puedes dar al mundo , y disfrútalo en la intimidad también si crees que eso es lo que tu alma necesita en algún momento, y canta y grita sin temor…..como dice una campaña publicitaria ahora “este es tu momento!”
Suerte y enhorabuena bro!!!
Después de más de ocho años sin vernos, me he enterado casualmente de que próximamente te casas. No tengo muy claro todavía que es lo que me ha hecho sentir la noticia, es curioso… En todo caso me ha hecho buscarte, y aquí te he encontrado. Luego al leer la entrada del concierto de Bruce, me he acordado de un montón de cosas más. Creo que yo también canté “No me la sé” en alguna ocasión, con los dos, con Iván y contigo.
No espero nada, de verdad, sólo que leas esto.
Que seas muy feliz.
Silvi
¿Aquí no hay porno amateur?, pues vaya un blog.
Quiero tocar unos temas contigo Harecillo, pero a veces tu trabajo se interpone en mis deseos; mis tareas también, por qué engañarme. Pero es una lástima que en ese punto donde nuestros anhelos confluyen, me encuentre a veces un muro de cristal, invisible, pero gigante. Quizá ninguno de nosotros tenga una pértiga lo suficientemente alta como para saltar el muro, pero si butroneamos juntos , cada uno desde su lado, es posible que nos encontremos en algún momento. Sería fantástico. Tengo, no sé por qué, grabado en la memoria una imagen; recuerdo cuando hicieron ingleses y franceses el túnel del Canal, cada uno por su lado, y acabaron encontrándose en la mitad del camino. Cuando perforaron la unión, los ingenieros se fundieron en un abrazo. Creo que aquella imagen, refleja bien a lo que me refiero. Un beso grande. Te espero al otro lado..
Me ha encantado Gorkilla, cuando quieras este fin de semana pásate a “butronear” conmigo hermano
Un abrazo,
Hare
Dani? 🙂 No he encontrado ninguna foto tuya por este blog, pero espero que seas el Dani Hare que conocí el primer día de la Uni, con las legañas en los ojos esperando para que nos dieran turno de laboratorio….
Me encontré el otro día, vete a saber porque, cantando alguna parte de alguna de tus canciones por la calle… y me dije que hacía mucho mucho muchísimo que no sabía de ti. Gracias a San Google, veo que sigues vivo. 🙂
Un abrazo muy fuerte de Ignacio!!!
[…] ser lo que es vivir hoy. Ni que decir que me ha encantado. Mucho. Hare decía que yo voy haciendo fotos a litros vacíos en contenedores, y ese es el quid. La quiddidad misma. Es una casa que rehuye la organización perfecta y sobrevive […]
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Yo soy uno de esos que dicen que los requerimientos para vivir, pagar el alquiler y el resto de demasiadas cosas que penden de mis costados me han lastrado tanto que ya no me acuerdo de lo que era vivir cuando vivía. Ya no me gusta tocar la guitarra, más que a veces (suele coincidir que…)
Intento no correr demasiado, pero me paso la vida corriendo, huyendo de todo. Algunos han muerto en el camino, algunos que eran demasiado buenos para morir (aunque nadie es demasiado malo para ello), muchas ilusiones también han muerto (aunque no se lo merecían). Huyo de todo porque ya sólo sé vivir corriendo. Me siento mal, pero sólo a ratos.
En el núcleo, en las rodillas, en los músculos tractores que me impulsan adelante estoy yo. Es jodido de explicar, mucho más de entender, y casi imposible de asumir, pero sigo siendo yo el que está detrás de tanto ruido.
A veces, a las dos de la mañana, cuando nadie está cerca y no corro peligro, cojo la guitarra y toco “cada amanecer”. Y se lo dedico a todos los que no están y deberían seguir estando, y a todos los que están aunque no deberían hacerlo, y a todo lo que yo fui y que me está esperando en el primer recodo del camino.
Para cuando pueda pararme a tomar aire.
Mientras tanto, soy una exhalación.
Lo importante es no quedarse quieto. Mientras no estás quieto no pueden verte. Es importante que no puedan verte.
Sigues siendo tú el que está detrás de tanto ruido, aunque tú creas que te pierdes los demás tenemos el filtro adecuado para encontrarte.
No te “Ortondices” Miguel, mucho de lo que muchos somos te lo debemos a ti y a tu forma de mantenerte incorrupto, a pesar de las prisas y los ruidos.
Un abrazo,
Hare