Me topé con esta noticia que me dejó pensando en este mundo nuestro tan raro. ¡Qué tipo! ¡Sigue logrando cosas hasta después de marcharse! He leído en algunos comentarios a la noticia que no durarán los apadrinamientos. Siempre hay gente que prefiere buscar la mancha en el cielo a maravillarse…
Vino Gorka y hablamos de qué pasaría si todas las personas del mundo “desarrollado” apadrinásemos a alguien del otro lado. No me refiero al euro al día ese mítico (que es más que no hacer nada) , sino a hacernos cargo de alguien de verdad, como un hijo o un amigo que se viene a vivir a casa. No costaría tanto como creemos y podría ser la manera.
De alguna forma se lo debemos por todas las fechorías que han hecho en nuestro nombre la gente a la que votamos. No puedo dejar de pensar en nuestra visión hipócrita del hambre en el mundo. Cómo explicarías a un niño que una parte del mundo se empeña en hacer alimentos con menos calorías para que no engorden,que no alimenten, mientras la otra intenta encontrar cualquier alimento para seguir con vida.
No me veo tan valiente como para dejarlo todo e irme a echar una mano como hizo Vicente Ferrer ,es verdad. Hasta que encuentre el coraje, me queda el pataleo, los eurillos que doy a las ONG, la mini difusión en este blog, en las conversaciones que tengo, en las canciones que escribo y en la actitud que intento tener ante la vida. Es más una guerra de guerrillas que una batalla real… aunque la Historia ha enseñado a los países más poderosos a temerlas 😉 Sí, puedes pensar que hacer estos planteamientos es ser muy ingenuo. Yo prefiero serlo e intentarlo a mirar para otro lado y no hacer nada ¿y tú?